Estrés: seis cosas de debes saber


Si usted es como mucha gente, que vive a un ritmo apresurado y le gustaría estar menos estresado, le brindamos seis recomendaciones para gestionar mejor esas ansiedades y preocupaciones.
Si es de los que está constantemente buscando como reducir el estrés, seguramente estos consejos le ayudarán a cuidar mejor su salud mental y física.



1). Estrés negativo vs estrés positivo

No hay eventos que sean objetivamente estresantes. Los expertos en salud mental aseguran que el estrés es un hecho único que le puede pasar a una persona, o sea, lo que puede ser estresante para usted, quizás no lo sea para otra persona.
Los investigadores que miden los acontecimientos estresantes, dicen que incluso una experiencia que muchas personas esperan, como las vacaciones, para algunos pueden ser estresantes. La razón es que, aún para las vacaciones, se requiere algún tipo de adaptación y para mucha gente cualquier desviación de su vida normal, es suficiente para transformarse en un acontecimiento estresante.
Los individuos mayoritariamente se sienten estresados cuando creen que no tienen recursos necesarios para administrar una amenaza o desafío.
Entonces, ¿dónde está el secreto de esto? Los nuevos datos provienen de un estudio publicado por un equipo de psicólogos de la Universidad de Columbia.
En dichas investigaciones encontraron que las personas con una mentalidad de estrés positivo fueron, de hecho, más capaces de manejar la tensión inducida en el laboratorio. En un contexto de trabajo, también eran más propensos a buscar retroalimentación sobre su desempeño, que a su vez les permita crecer aún más de sus experiencias.
La moraleja de la historia es que si quieres manejar el estrés con mayor eficacia, no creer que todo el estrés es tan malo. Trate de ver el estrés con una mentalidad positiva y de hecho, tendrá más capacidad de hacerle frente.



2). ¿Qué genera el estrés?

Lo cierto es que la gente juega un papel activo en la creación de sus propios eventos estresantes, en virtud de la forma en que manejan sus situaciones de la vida cotidiana.
Un grupo de psicólogos de la Universidad de Texas realizó un estudio durante 6 meses, en el cual hizo un seguimiento a más de 600 personas.
El estudio concluyó que en las pruebas de personalidad, pasados los 6 meses, las personas que tenían altos niveles de neuroticismo eran más propensas a describir nuevos eventos negativos.
Por el contrario, las personas que tendían a mantener una actitud fría y distante con los demás (por ejemplo, trastorno de la personalidad por evitación) tuvieron menos eventos negativos en los siguientes 6 meses.
El resultado es que, al preocuparse constantemente, estar ansioso, y exagerar los acontecimientos, puede crear el caos real que afectará su vida diaria.



3). Estrés contagioso

Un estudio en el servicio de atención al cliente de una compañía de seguros rastreó los cambios de estados de ánimo de los telefonistas durante todo el día, en respuesta al contacto con los clientes.
Los empleados calificaban las emociones mostradas por los clientes junto con la forma en que se sentían después de terminar la llamada.
La investigación reveló como después de hablar con un cliente que mostró una postura negativa, los empleados estaban más estresados, eran menos productivos y además, más propensos a tomar un descanso después de dicha llamada.



4). Aprender técnicas de empatía

Psicólogos organizacionales que estudian el estrés en el lugar de trabajo, utilizan el término "trabajo emocional" para describir el costo para los trabajadores cuyo trabajo les obliga a "ser amables", independientemente de cómo se sienten. Ser amable es una parte de la mayoría de los puestos de trabajo, pero para algunos es el principal requisito. Las personas que trabajan en ocupaciones de servicio, tienen que estar constantemente en una actitud agradable para el público.

Estudios realizados la Universidad de Chicago investigaron el trabajo emocional entre los empleados de un hotel, cuyos trabajos requieren mantener una disposición agradable, incluso si no son tratados muy bien.
  
Se encontró que los trabajadores que tienden a tener un carácter alegre tenían un trabajo emocional inferior, porque era fácil para ellos ser agradable a sus clientes.
Los problemas se producen cuando las personas no tienen un carácter jovial y lozano.
El trabajo de ser agradable es emocionalmente agotador ya que los trabajadores deben dar una imagen que no es la real.
La única forma en que estos trabajadores pueden reducir su estrés, según los autores del estudio, es aprender técnicas de empatía.
Aprender estas técnicas puede ayudar a ver las cosas desde un punto de vista diferente, esto podría significar no solo un mejor desempeño laboral, sino que también, significativas mejoras en sus niveles de estrés.
Recuerde, si usted tiene una responsabilidad que implica un cierto grado de trabajo emocional, debería pensar seriamente en aprender técnicas de empatía, se asombrará lo positivo que pueden llegar a ser.



5). Cuidado con el maltrato

Mucho hemos oído hablar de los problemas de maltrato o acoso escolar, incluso ya tiene su nombre se le denomina “Bullyng”, sin embardo poco se habla del maltrato laboral en los adultos.
Diversos estudios universitarios han alertado sobre el impacto de la violencia o acoso laboral en los niveles de estrés.
El acoso laboral lleva al aislamiento social, conductas de evitación e híper excitación, entre otras.
Las víctimas pueden incluso no ser consientes, al principio, de que están siendo víctimas de maltrato. Con el tiempo, estos actos tienen a empeorar y a menudo se transforman en acciones más directas como la agresión, la humillación y el ridículo.
Si usted está estresado, quizás esté siendo víctima de maltrato laboral; en este caso, es importante reconocerlo sobre todo en las primeras etapas. De ser así, se debe buscar apoyo, ya sea un supervisor o defensor del trabajador.



6). El estrés se acumula

Un estudio de la Universidad de Estocolmo realizó un ensayo sobre los patrones de estrés y el sueño de 30 profesores.
Compararon los niveles de estrés de los profesores mediante puntajes, cada cual puntuaba cada día como su sueño había estado afectado por el estrés.
Los profesores calificaron sus días como altas o bajas en el estrés y calidad del sueño, los resultados se compararon a través de esas dos condiciones.
Las semanas que se sentían estresados, los maestros más sensibles al estrés tenían peor calidad del sueño, se sintieron más cansados y tuvieron peor comportamiento en las pruebas de la función cognitiva.
El estudio sugiere que si usted es alguien cuyo sueño se interrumpe fácilmente por el estrés, la cantidad de estrés tendrá una pesada carga sobre usted durante el día. Más estrés durante el día dará lugar a un sueño pobre por la noche y el ciclo continuará.